El auge en el uso de patinetes, bicicletas eléctricas y otros vehículos de movilidad personal (VMP) y los accidentes de tráfico en los que se han visto implicados los ha convertido en un elemento más de riesgo en materia de seguridad vial. De ahí que el Gobierno se plantee ya la posibilidad de establecer una norma que exigiría a los conductores de estos vehículos contar con un seguro obligatorio de responsabilidad civil. Una de las cuestiones que se discutirán en el desarrollo de esa norma es si esa póliza se articula sobre los vehículos, lo que exigiría un registro de los mismos mediante su matriculación o un sistema similar, o se asegura al conductor.

El objetivo es que los usuarios de VMP puedan responder económicamente ante los daños que puedan causar a terceros, por ejemplo, en caso de atropello de un peatón, como ya sucede con los automóviles y motocicletas, que para poder circular deben contar con un seguro de responsabilidad civil por este mismo motivo.

La reciente reforma de los reglamentos de Vehículos y de Circulación impulsada por la Dirección General de Tráfico (DGT) equipara los patinetes, bicicletas eléctricas y otros tipos de VMP con los vehículos a motor. De hecho, prohíbe que circulen por aceras y zonas peatonales, limita su velocidad a un máximo de 25 kilómetros y los obliga a cumplir las normas de circulación como el resto de los conductores, entre otras normas, pero no hace obligatorio contar con un seguro para circular con ellos. 

Sin embargo, hace más de un año la Fiscalía de Seguridad Vial avisó del peligro de circular sin seguro y anunció que, de forma coordinada con las partes implicadas, impulsaría fórmulas de cobertura en relación a los accidentes provocados por estos vehículos. Algunos ayuntamientos, por su parte, han revisado sus ordenanzas de movilidad y obligan a los usuarios a contar con un seguro de este tipo para circular por esas ciudades.

“La protección de los terceros perjudicados, en especial los de mayor vulnerabilidad, aconseja la introducción de determinadas obligaciones legales de aseguramiento, hasta el momento inexistentes, para los denominados vehículos de movilidad personal”, dice el documento de consulta pública previa del proyecto de ley.

Aspectos clave

La futura norma, entre otras cosas, determinaría los límites mínimos de aseguramiento obligatorio que deben ser exigibles en función del riesgo que puedan generar los VMP. Esto significa que, conscientes de que en general los daños materiales y corporales que pueda provocar un patinete no son los mismos que puede generar un coche, las indemnizaciones podrían ser diferentes a las establecidas para los coches y motocicletas.

Otro aspecto a aclarar, según ese documento, es “en qué medida es preferible articular su aseguramiento sobre la base tradicional del seguro por cada vehículo o sobre la más novedosa del aseguramiento obligatorio de la movilidad personal de los usuarios de estos vehículos”. 

Según el modelo tradicional de aseguramiento por cada vehículo, que es el actual de los coches y las motocicletas, lo que se asegura es el vehículo. Para poder suscribirlo, por tanto, tendría que existir un registro de patinetes, bicicletas eléctricas y el resto de VMP, como por ejemplo a través de una matrícula o un QR. Estos trámites administrativos podrían, por un lado, desincentivar el uso de VMP y, en el peor de los casos, llevar a sus usuarios a no asegurarlos.

Asegurar a la persona y no al vehículo

La otra fórmula consiste en que se asegura al usuario o propietario y no al vehículo, lo que agiliza y facilita la suscripción al no ser necesario el registro administrativo del VMP. Algunas compañías ya ofrecen cobertura de responsabilidad civil a los usuarios de estos vehículos a través del seguro de hogar, sin embargo este no es un seguro obligatorio, lo que podría dejar sin cobertura a muchos usuarios, especialmente a aquellos que, por ejemplo, viven de alquiler.

Otras compañías, por su parte, han lanzado ya pólizas exclusivas para los usuarios de VMP. Es el caso de Safe&GO, de la marca de Vivaz de Línea Directa Aseguradora, primer seguro específico para usuarios de VMP que asegura al usuario y no al vehículo, cubriéndole tanto sus daños físicos como los que pueda generar a terceros a través de coberturas de responsabilidad civil, gastos médicos, defensa jurídica y fallecimiento o invalidez. Además, esta póliza permite tanto el pago anual como el pago por uso, permitiendo al usuario activarlo y pagar solo por los trayectos que va a realizar.